ya tu rostro yacía desde el origen
símbolo impreso en la memoria cognitiva de las piedras
-en las que están bajo agua-
era tu rostro beso de agua
tímido beso de arroyo casi dormido

desde ahí todo se te sucedió
fuiste bebedero de las primeras criaturas
manantial de verdes praderas
vehemente lluvia por los tiempos de Noé
Nilo de faraones
mar enfurecido con el Ulises loco de aventura
al que alguien esperaba
oasis del desierto donde ese hombre multiplicó panes y peces
lágrima de una Julieta que a un Romeo enamoró
canal veneciano
amazona
vertiente serrana
hasta ser sangre de tus primeros antepasados

resolviste aparecer
resolviste darte
en el vientre de tu madre
madre de agua también
comulgaste por última vez con los dioses
después ya lo sabes
eres Leticia humana
así te lo contaron
la que hoy sos
la del rostro de agua
la del alma de agua
la del agua que nadie ve
te lo cuento porque mis huesos aún te recuerdan
fui aquellas piedras alguna vez